El presidente del consejo de Estado de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez,ha sido designado como nuevo primer secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC), en sustitución de Raúl Castro. El anuncio oficial se hizo este lunes en la clausura del VIII Congreso del PCC, iniciado el 16 de abril último. Las primeras palabras de Díaz Canel como nuevo líder del PCC fuern: «Lo más revolucionario dentro de la Revolución es defender siempre el Partido, de la misma forma que el Partido debe ser el mayor defensor de la Revolución».
En la inauguración del evento, el General de Ejército Raúl Castro, quien cumplirá en junio próximo 90 años, confirmó lo que ya había notificado en 2016, que entregaría la dirección del país a la nueva generación de funcionarios. En 2018, al Castro traspasar la presidencia de la República a Díaz-Canel, también afirmó: «En lo que a mí se refiere me mantendré desempeñando el cargo de primer secretario del Partido Comunista de Cuba en mi segundo y último mandato que expira en 2021. Cuando yo falte, Díaz- Canel podrá asumir el cargo de primer secretario».
Al igual que Castro, se retiran del PCC otros de los llamados «dirigentes históricos»: José Ramón Machado Ventura (90 años), Ramiro Valdés (89 años) y Leopoldo Cintra Frías (79 años), quien a pocas horas de iniciar el Congreso, fuera destituido como ministro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR). Se retiran igualmente de la cúpula del PCC: Marino Murillo (61 años), quien ha estado implementando en los últimos años los lineamientos económicos y sociales en la Isla, y Lázara Mercedes López Acea (56 años), ex primera secretaria del PCC en La Habana.
De esta manera, según palabras de Castro, «concluye mi tarea como Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba con la satisfacción de haber cumplido y la confianza en el futuro de la patria».
En su Informe Central del Congreso, Castro también declaró que Díaz-Canel «no es fruto de la improvisación, sino de una pensada selección de un joven revolucionario con condiciones para ser promovido a cargos superiores».
El poder en la sombra
Díaz-Canel ha tenido una larga trayectoria como dirigente partidista en Cuba; fue durante 15 años el Primer Secretario del PCC en las provincias de Villa Clara y Holguín; luego se desempeñó como ministro de Educación Superior, vicepresidente del Consejo de Ministros y primer vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros. En 2018 es designado por Castro como presidente de Cuba.
No obstante, varios especialistas y opositores cubanos alertan que este supuesto traspaso de poder es solo aparente pues no es Díaz-Canel quien ostenta el poder real en Cuba, sino que hay una cúpula que opera en las sombras y es la que mueve los destinos del país. Se trata de, por un lado, del coronel Alejandro Castro Espín, hijo de Raúl, quien coordina los dos ministerios más importantes de Cuba, el Ministerio del Interior (MININT) y del Ministerio de las Fuerzas Armadas (MINFAR), además de tener a su cargo todos los agentes de inteligencia (G2) y contrainteligencia que proceden del MININT; y, por otro lado, del general Luis Alberto Rodríguez López- Calleja, exyerno de Raúl, excuñado de Alejandro, y quien está al frente del conglomerado de empresas militares conocido como GAESA (Grupo de Administración Empresarial), que ingresa alrededor del 80% del PIB cubano.
Asimismo, según declaraciones a CubaNet de Guillermo (Coco) Fariñas, líder de la organización opositora Frente Antitotalitario Unido (FANTU), con la designación de Álvaro López Miera como nuevo Ministro de las FAR, a poco de iniciar el Congreso, Raúl Castro «trata de decirle a los dos grupos restantes», el de Castro Espín y el de López-Calleja, «que la fuerza la tiene su hombre de confianza. Están institucionalizando quien está realmente al frente de la junta militar. Esta movida busca que no se divida aún más el neorraulismo».
Para Antonio Rodiles, coordinador del grupo opositor Estado de Sats, el Congreso ha sido puro teatro y, la designación de Díaz-Canel, una maniobra que pretende dar una imagen de apertura y democracia. «Hay que recordar también que la Ley Helms-Burton dice que no puede haber un Castro en el poder para pasar al levantamiento de las sanciones, del embargo y, por supuesto, ellos toman nota de todo esto y por eso ponen a Miguel Díaz-Canel, alguien que ha demostrado ser un personaje bien gris y muy disciplinado. Entonces, en ese sentido, creo que es el idóneo», aseguró.
La peor crisis en Cuba
Según desveló ABC , Castro se retira gravemente enfermo, pues padece cáncer de esófago y de recto, con diarreas crónicas; padece igualmente de cirrosis hepática causada por su vieja adicción al alcohol.
Además, Castro, aunque se mantendrá hasta su muerte como General de Ejército, deja el PCC en medio de la peor crisis económica en Cuba, incluso más grave que la vivida en la isla en los años noventa, cuando se desintegró en campo socialista. La situación en el país es cada vez más tensa, la crisis económica y sanitaria se evidencia en el creciente desabastecimiento de alimentos y medicinas, la inflación y el aumento de los casos y muertes por Covid-19.
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Fuente: ABC
